lunes, 8 de septiembre de 2008

Desde Zamora: Un sequillo


El día que estuvimos visitando Zamora, mi madre, a pesar de no poder comerlos, decidió comprar algunos dulces, para nosotros, dijo. En una tienda, donde yo compré postales (of course).

Es un sequillo, según la dueña de la tienda un dulce típico, que es como un buzcocho, pero sin aceite y menos dulce, pero ideal para tomar con café o con chocolate en rodajas.

Pues dicho y hecho, esa noche hice chocolate y ea, riquisimo, pero para comer sólo, pues como que no merecía tanto la pena. No obstante, os lo recomiendo.

Es un dulce de convento, hecho con el mimo artesano de las monjas zamoranas, que hay muchas y de clausura la mayoria.

Hablando de dulces de convento, en estos días, además, se está celebrando en la capital zamorana la muestra de productos de conventos, donde aparte de dulces, cuentan con licores y otro productos, todos realizados artesanalmente, sin ningún aditivo que no sea natural y dentro de las paredes de un convento.

2 comentarios:

seraim dijo...

mmmm qué rico el chocolate.... ahora estoy haciendo un bizcocho de choco en la Thermomix ;)

Maritere dijo...

Mandame un poco, jejejeje. Que arte que tiene la thermomix.